Hablemos de nuestro ego. ¿Qué es el ego?

En reflexiones anteriores, hemos hablado de la Chispa Divina, del Ser, del hondón del alma… En ésta y la próxima reflexión vamos a pensar un poco sobre nuestro EGO: ¿Qué es el EGO? ¿Desde dónde vivimos: desde el Ser o desde el ego?

¿Has comparado alguna vez la mente con el océano?  A la profundidad de la mente se le llama el SER.

Es la esencia de todas las cosas, la energía de la cual todos formamos parte. Es la consciencia pura, el todo, es Dios…….. Cuando nos experimentamos en el SER, nos sentimos UNO, con uno mismo, con Dios, con los demás, con el cosmos… es esa experiencia de PAZ INTERIOR de la que una no quisiera salir jamás…

La superficie de la mente es el EGO.

El Ego es la identificación con el yo físico, mental y emocional. Es decir: cuando nos identificamos con nuestros pensamientos, con nuestra familia, con nuestro trabajo, nuestra historia o con el mundo que nos rodea es cuando vivimos desde el ego: yo-mi-me-conmigo.

El ego es la máscara, la idea que tenemos de nosotros mismos y con la que nos identificamos, el personaje que representamos…

Se alimenta de la atención de los demás… del reconocimiento, la alabanza, la admiración, su excelencia… Cuando le reconocen, se siente feliz, cuando le critican o rechazan podría caer en aguda depresión…

El Ser es lo que tu eres, es tu verdadera naturaleza, libre de conceptos, condicionamientos, ideas, prejuicios y pensamientos…….. El SER es la realidad absoluta, es consciencia pura, es Dios!!!

Para reflexionar:

                  ¿Desde qué nivel de consciencia vivo? ¿Desde dónde miro la realidad?

• ¿Desde los condicionamientos mentales? ¿Esas experiencias no integradas ni procesadas de la infancia que me sitúan en el EGO, en el apego a mis necesidades más superficiales, porque no fueron satisfechas en la infancia?
• O me sitúo en el nivel de consciencia más hondo, en ese espacio interior donde me habita el Espíritu de Dios y donde experimento la PAZ que trasciende cualquier realidad frustrante?

                                                                                                                                     Paloma Marchesi