Testimonio de Carolina. Ejercicios espirituales en julio
Quiero expresar mi eterno agradecimiento por los días que estuve en Ávila con ustedes. Todavía recuerdo mi llegada y esos primeros días de desánimo que tuve y cómo ustedes con sus conversaciones y consejos lograron que adoptase una nueva perspectiva para afrontar las cosas, pero también consiguieron que me sintiera como en casa. De verdad, estoy y estaré eternamente agradecida.
He de confesar que para mí la experiencia del retiro y el haber participado en los ejercicios espirituales supusieron un cambio interior que considero de vital importancia y necesidad. Por ello, me gustaría que me informasen de futuros retiros y encuentros pues estaría encantada de poder participar una vez más de ellos. A mi regreso todo el mundo me ha dicho que vengo cambiada, con una nueva luz, y es indudablemente consecuencia de esta experiencia. Siento que mi alma está mejor, más curada y que es más plena.
Ya en mi casa no dejan de resonar en mí muchas de las cosas que hemos hablado y que he descubierto de Santa Teresa. Creo, confío y espero que me sirvan como soportes para poder comenzar esta nueva etapa de mi vida a todos los niveles.
Saludo a todas las hermanas. Las tengo muy presentes en mi vida y también en mis oraciones. Siempre serán parte de mi vida y no dude que buscaré el momento de volver a verlas y de mantener el contacto.
Un fuerte abrazo a todas
Carolina